Estudios recientes demuestran que si las personas dibujamos, tendremos más retentiva de las cosas, es decir, mejoraremos nuestra memoria. Es más fácil para el cerebro relacionar un dibujo con algo tangible, que una palabra con algo tangible.
El pensamiento visual o visual thinking en el área educativa resulta ser una herramienta muy productiva para los profesores y muy funcional para los estudiantes. Este tipo de herramienta se puede usar para cualquier asignatura, ayuda a que temas complejos y robustos sean más digeribles obteniendo mayor retención en los estudiantes.
Su base son los dibujos pero no necesariamente deben ser dibujos profesionales, son dibujos a manera de mapas mentales, lo importante es que transmitan lo que el profesor quiere explicar. La clave de esta herramienta es usar colores para jerarquizar los conceptos, conocer y estudiar muy bien el tema para conceptualizar el contenido por medio de dibujos. También se requiere de una escucha activa pues los estudiantes ayudarán a que el mapa visual fluya con los conceptos.