Colombia
Una jornada laboral de ocho horas, salario justo y otros derechos que hoy en día consideramos incuestionables, fueron el resultado de años de sangre, sudor, lágrimas… y las vidas de varios trabajadores. Es por esto por lo cual celebramos, este sábado primero de mayo en distintos lugares del mundo, el Día del Trabajador, una festividad para recordar la importancia de los derechos laborales.
¿Por qué se celebra el 1 de mayo?
Durante esta misma fecha, en el año 1886, un grupo de sindicalistas de Chicago organizaron una huelga que se prolongó por todo Estados Unidos, terminando con la sangrienta Revuelta de Haymarket el 4 de mayo. Tres de ellos fueron a prisión y cinco murieron en la horca. Su objetivo era conseguir que se cumpliese la Ley Ingersoll, que indicaba a las empresas y fábricas brindar una jornada laboral de ocho horas diarias a sus trabajadores. De esta forma podrían tener tiempo para sus hobbies y descansar. Aquel era un derecho que las patronales pasaban por alto, lo que provocó la furia que se desencadenó en las protestas.
Inspirados por los Mártires de Chicago, el Congreso Obrero Socialista de la Segunda Internacional, celebrado en 1889, París, fijó la fecha del 1 de mayo para rendir tributo a sus compañeros obreros, que habían dado sus vidas por hacer que sus derechos fueran respetados.
De forma paradójica, en Estados Unidos y Canadá la fecha fue trasladada al primer lunes de septiembre, con el fin de evitar que el movimiento socialista se reforzara. No obstante, los trabajadores que sacrificaron sus vidas y trabajos para llevar a cabo la huelga del 1 de mayo, motivaron a otros trabajadores alrededor del mundo con sus acciones, y así, poco a poco, la celebración del Día del Trabajo se fue extendiendo.
“La Fiesta del Obrerismo”
En Colombia, el Día del Trabajo se llamó inicialmente “La Fiesta del Obrerismo”, dado que no existía una clase obrera bien definida. El festejo comenzó en el año 1914 y su primera marcha fue en Bogotá: 3.000 personas partieron desde la plaza de Bolívar hasta el barrio La Perseverancia.
Actualmente, después de más de cien años de los eventos del 1 de mayo, miles de trabajadores de diversas nacionalidades marchan pacíficamente con las frentes en alto y la mirada fija en sus nuevos objetivos: mejores condiciones salariales, contrataciones justas y mayores oportunidades en las que puedan demostrar sus habilidades. Porque todos somos capaces de lograr grandes cosas, pero necesitamos del apoyo de nuestros superiores para conseguirlo.
¡Feliz Día del Trabajador!
Fuente: El País, El Empleo